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Los laicos que de modo permanente o temporal se dedican a un servicio especial de la Iglesia tienen el deber de adquirir la formación conveniente que se requiere para desempeñar bien su función, y para EJERCERLA con conciencia, generosidad y diligencia. CDC 231

Como todo buen cristiano es necesario que estemos formados debidamente y más si servimos en algún ministerio dentro de la iglesia. Es por eso que los ministros extraordinarios de la sagrada comunión ésta semana han recibido talleres de formación dados por los Pbro. Pablo Mora, Juan Olarte y José Ortega en donde se tocaron temas como: “La identidad del ser y hacer de los ministros extraordinario de la sagrada comunión, llevar la palabra a todo lugar en especial visitar a los enfermos que tanto lo necesitan haciendo obras de misericordia. Se elogió también la labor de los párrocos en las parroquias y se les invitó a seguir el evangelio de la vida, ese que el papa Francisco nos invita. Las formaciones de los ministros extraordinario de la sagrada comunión se llevan a cabo en el salón parroquial del Santuario Nuestra Señora del Carmen donde se contó con la participación de más de 250 ministros extraordinario entre nuevos y existentes. El sábado 23 de mayo es la próxima formación. Contamos también con algunos testimonios de los presentes tales como: Gloria tesis, enfermera,   “Por mis hijas le dije al Señor que quería servirle hasta el último día de mi vida, y empecé visitando a los enfermos, ahora soy ministra extraordinaria de la Sagrada Comunión.” Elvira Ramos, “Visito a los enfermos desde el 2008, es una experiencia muy linda en donde el Señor me ha dicho que el que no se enamora de Él no puede hacer éste servicio.”

EI fiel designado ministro extraordinario de la Sagrada Comunión y debidamente preparado, deberá distinguirse por su vida cristiana, su fe y sus buenas costumbres. (Immensae Caritatis, 1, VI)
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