El pasado viernes 20 de noviembre, en el Gimnasio del Colegió Abel Bravo, ubicado en el corregimiento de Cristóbal, desde las 6:00 p.m. albergó a los fieles en un acto de fe cristiano: a Cena de Pan y Vino, cuyo lema fue: “MAESTRO, ¿Dónde VIVES?… VENGAN Y VERAN (Jn. 1, 38-39).
Esta actividad se volvió a retornar después de mucho tiempo de no realizarse en la diócesis. Monseñor Manuel Ochogavia toma la decisión, junto con su equipo de sacerdotes, de retomar la tarea de organizar la Cena de Pan y Vino, la cual no es solamente para recaudar los fondos para los gastos de los futuros sacerdotes, sino también de reunirnos como iglesia diocesana y pedir a Dios por más vocaciones a la vida consagrada específicamente al sacerdocio.
Los presentes tuvieron la oportunidad de escuchar el testimonio de Monseñor Jose Domingo Ulloa, Arzobispo Metropolitano de Panamá,qQuien expreso su caminar, servicio, amor y pasión por su vocación sacerdotal de la cual manifestó enfáticamente que la misma tiene sus momentos difíciles, pero también agradable, sus momentos de tristeza, pero también de mucha alegría, que aunque el camino este lleno de espinas tiene sus gratas recompensas que no se comparan con nada, porque es Dios quien sostiene y alivia las cargas.
Monseñor Ulloa invitó a los presente a vivir con amor, entrega y servicio la vocación que han elegido ya sea esta la del sacerdocio, la del matrimonio o la de ser soltero(a).
Nos acompañaron los obispos: Mons. Andrés Carrascosa, Nuncio Apostólico en Panamá; Mons. Uriah Ashley, Obispo Auxiliar de Panamá; Mons. Pedro Hernández, Obispo del Vicariato del Darién y algunas autoridades de nuestra provincia.
La actividad comenzó con la entrada de los obispos, sacerdotes y seminaristas. Varias interpretaciones musicales tuvieron los integrantes de la banda sinfónica del Colegio Miguel Febres Cordero. También participaron las danzas Afroantillana por Crisna Menacho y Ernesto Polanco.
La Cena de Pan y Vino, no debe ser vista como una actividad más que organiza la Iglesia Católica, sino como una ayuda generosa y solidaria para esos nuevos y futuros sacerdotes que se preparan para servir y dar a Cristo en las comunidades.